26 mar 2017

RETENGO TU VOZ ENTRE MIS MANOS



Hace ya tantas lunas que mis manos no te besan
ni te palpan las pupilas de mis sueños
que extrañan la luz de tus latidos
y el aroma matinal de tus halagos.

Hace varias horas que acumula mi cansancio
el tedio inusitado que me ofusca
e impide avanzar por mi camino
sin el bálsamo eficaz de tus caderas…

Ya son varios miles de suspiros que me aturden
y me alejan de la meta cotidiana
sin que el rumor de tus latidos me arrulle
y me lleve hasta tu cielo que retengo en mis dedos
desde la noche estival que nunca omito.