1 oct 2015

CONFUSIÓN


Advierto que me miras de reojo
mientras aclaro mis sueños
en la nebulosa de esta tarde apurada
que ya se tiende a dormir
en el lecho del ayer.

He anotado en mi piel
el poema que preparé para ti
mientras caía esa tarde
entre tus muslos de seda
que mis manos exploraron
mientras gemían tus dedos
en mis pupilas enamoradas
de tu infinidad de musa…

Pero estoy aquí
sediento de tu piel,
añorando la fe que ya no tengo
para seguir latiendo
y no morirme en este ocaso.