Yo no tengo la culpa del pecado, de algún Adán inmisericorde...
Exímeme mujer de este castigo
por tantas necedades
sufridas en mi ausencia.
Perdóname amor por las ofensas
obradas en tu contra
antes de conocernos,
obradas en tu contra
antes de conocernos,
antes de cruzar nuestras miradas
y nuestras almas.
Porque pagando estoy la culpa cometida
por la insensata filosofía de un ayer
que no es mi ayer, pero me hiere.
y nuestras almas.
Porque pagando estoy la culpa cometida
por la insensata filosofía de un ayer
que no es mi ayer, pero me hiere.
